Culiacán en bici, mi experiencia personal
Hay muchos mitos o prejuicios sobre el uso de la bicicleta como modo de transporte en Culiacán, por eso, en el marco del día internacional de la bicicleta, me gustaría compartir mi experiencia personal sobre lo que ha significado recorrer Culiacán en bici.
Checa esto: La bicicleta en el espacio público.
Motivos personales para usar la bici como modo de transporte.
Desde hace aproximadamente 5 años decidí iniciar a utilizar la bicicleta como medio de transporte debido a diversas razones:
La primera de ellas fue el asombro que me dio al saber que en un estudio realizado en diferentes países del mundo arrojaba que las personas jóvenes de los países bajos eran las más felices en el mundo y que esto podía ser en parte gracias a los hábitos de movilidad que tienen en dicho país, donde la bicicleta tiene un papel sumamente importante en los desplazamientos cotidianos.
Andrés Salazar, ciclista urbano.
Agregando a esto, el tema ambiental fue también importante debido a que al utilizar la bicicleta no emitimos gases de efecto invernadero, por lo tanto es una de las mejores formas de movernos en nuestra ciudad sin hacerle daño a nuestro planeta. Esto pensando teóricamente de las ventajas que tenía hacer un cambio en mi movilidad, pasando a la práctica sabía que encontraría tanto cosas buenas como malas.
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Fuente: Mapasin
Mi día a día como ciclista en Culiacán.
Así que dejando de lado los motivos personales que me llevaron a pedalear cotidianamente y centrándome en la experiencia día a día puedo compartirles varias cosas:
- Es increíblemente relajante iniciar el día pedaleando hacia mi oficina.
- El ahorro económico es de considerarse ya que anteriormente mis desplazamientos eran mayormente en automóvil.
- Ahorro tiempo ya que ahora hago entre 10-12 minutos cuando antes hacía entre 18-20 minutos de recorrido más 5-10 minutos de búsqueda de estacionamiento, tomando en cuenta que mi recorrido es de aproximadamente 3 kilómetros.
- He conocido y experimentado mi ciudad y otras ciudades desde una perspectiva completamente diferente, descubriendo nuevos lugares e incluso re-descubriendo lugares que ya conocía pero no tomaba en cuenta.
- Me he vuelto más empático con otras personas y sus diversas formas de moverse.
- He hecho nuevas amistades y conocido personas muy valiosas que también se mueven en bici.
Fuente: Mapasin
No he de negar que he tenido ciertas experiencias desafortunadas pero aún así el gusto por pedalear no ha disminuido, al contrario, me llena de ganas de continuar pedaleando para reclamar mejores espacios que inviten a más personas a utilizar la bicicleta como medio de transporte.
Como comentario final, quisiera invitar a quienes leen este texto a que le den una oportunidad a la bicicleta, es una gran experiencia y le hará un gran bien a tu salud, a tu ciudad y a tu planeta.
Bici estacionamiento Jardín Botánico
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