SISTEMAS INTEGRADOS DE TRANSPORTE

Un Sistema Integrado de Transporte articula las distintas opciones de movilidad para cada usuario. Permitiendo así que este pueda utilizar distintos medios de transporte que actúan conjuntamente compartiendo infraestructura con itinerarios, así como tarifas definidas. Dicho sistema facilita los desplazamientos y mejora la accesibilidad de los usuarios.

Dicho sistema permite también un menor número de emisiones contaminantes y congestión vial, así como beneficios de tiempo, seguridad y economía al usuario por la reducción de tiempos de traslado, la definición de estándares de calidad y menores costos en el servicio.

Los beneficios económicos, sociales y ambientales de una política de integración del transporte público se resumen así:

– Accesibilidad. El sistema debe ofrecer las facilidades necesarias para que cualquier usuario, en especial personas con movilidad reducida, débiles visuales, y personas que cargan bultos o maletas, pueda utilizarlo y acceder a donde éste quiera ir.

– Cobertura. El sistema debe procurar servir la mayor parte del territorio urbano. A su vez, sus estaciones y paradas deben estar a una  distancia caminable y ser fácilmente accesibles desde los puntos de origen y destino.

– Disponibilidad. El sistema debe funcionar cuando el usuario lo necesita. Esto se consigue conjugando dos variables: frecuencia y horario de funcionamiento.

– Conectividad. Un SIT atiende la demanda en todas las zonas de la ciudad y ofrece el servicio en puntos de difícil acceso.

– Eficiencia. Frecuencias de paso con los horarios,  incorporación de estaciones fijas o la implementación de carriles de preferencia o exclusivos para el transporte público.

– Seguridad. Salvaguarda la integridad de los usuarios de la vía, al ofrecer altos estándares de calidad en la prestación del servicio.

– Sustentabilidad. En la medida en la que desincentiva el uso del automóvil particular además del uso de nuevas tecnologías en combustibles y unidades de servicio permiten mejoras sustanciales en la calidad del aire.

– Cultura de la legalidad. Procesos de adjudicación mediante mecanismos transparentes y efectivos.

– Asequibilidad. El sistema debe establecer una tarifa y modo de pago que lo haga asequible a la ciudadanía de escasos recursos, sin que eso signifique sacrificar las condiciones de prestación del servicio.

– Confiabilidad. El sistema debe ofrecer altos grados de confianza en aspectos como la frecuencia, velocidad de desplazamiento y rutas de los recorridos, que permitan la planeación de los viajes.

– Flexibilidad. El sistema debe ofrecer respuesta a necesidades de viaje cambiantes por parte de los usuarios. Esto se consigue combinando una serie de factores descritos anteriormente: mientras mayores sean la cobertura, frecuencia, y horario de funcionamiento, mayor será flexibilidad del sistema.

¡Conoce más en la Guía del ITDP y SEDESOL para Sistemas Integrados de Transporte!

Guia-Sistemas-Integrados-de-Transportes


Luis Angel GonzalezAutor: Luis Ángel González Valenzuela. Fue arquitecto por la Universidad Autónoma de Sinaloa en México y la Universidad de la Costa en Colombia y Especialista en Pensamiento Estratégico Urbano por el Centro Iberoamericano de Desarrollo Estratégico Urbano (CIDEU). D. E. P.

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