El día de hoy te queremos compartir sobre las zonas 30 km/h y que son. La definición de este concepto hace referencia a un espacio delimitado donde la velocidad máxima permitida para los vehículos motorizados es de 30 km/h.
La finalidad de la implementación de esta estrategia es reducir principalmente siniestros viales en cantidad y gravedad, así como el ruido, mejorar la calidad del aire y el flujo de tráfico, y animar los paseos en bicicleta, a pie o en transporte público.De acuerdo a la declaración de Estocolmo, la “Tercera Conferencia Ministerial Mundial sobre Seguridad Vial: Alcanzar los objetivos mundiales para 2030 Estocolmo” llevada a cabo el 19 y 20 de febrero de 2020, se mantiene un enfoque en la gestión de la velocidad, exigiendo una máxima de 30 km/h en zonas donde los usuarios vulnerables de la carretera y los vehículos se mezclan frecuentemente y de forma planificada, haciendo hincapié en que los esfuerzos por reducir la velocidad tendrán un efecto positivo y beneficioso en la calidad del aire y el cambio climático, además de ser vitales para reducir el número de víctimas mortales y heridos por accidentes de tránsito.
Las áreas en donde normalmente se suele aplicar este tipo de estrategia son las siguientes:
Zonas donde existe una gran afluencia peatonal
Alrededores de institutos educativos y hospitales
Lugares en donde hay gran paso de ciclistas
Zonas residenciales
Las zonas 30 han demostrado múltiples beneficios en el entorno urbano. Por una parte, se reduce el congestionamiento vial y muy notoriamente se incide en el descenso de atropellamientos en aquellas zonas donde los peatones están presentes de forma destacable.De igual manera, se ha demostrado una reducción de contaminación del aire generada por los motores de los vehículos y de contaminación auditiva en distintas zonas de la ciudad en donde se aplique.
Desde agosto del 2022 el presidente Juan de Dios Gámez Mendívil anunció que el centro de la ciudad se convertiría en zona 30, esto en el marco de celebración del día del peatón. Este proyecto constaría de tres etapas y la primera iniciaría con la concientización de automovilistas, así como también la señalética adecuada en los cruces de las calles y topes vibradores. La segunda etapa se enfoca en la detección de áreas de riesgo y la última en la construcción de banquetas y rampas.No hay que confundir las zonas 30 con las zonas peatonales, ya que las primeras siguen siendo vías en las que el vehículo y el peatón tendrán que compartir espacios y de igual forma, cumplir con las reglamentaciones de tránsito que se le indiquen.Como conclusión, no queda más que seguir insistiendo en la importancia de seguir mejorando nuestras calles para el beneficio de todos los usuarios, en especial para los más vulnerables. Las zonas 30 mejoran varios aspectos de nuestras ciudades y lo más importante, también salvan vidas. Al tener zonas con límites de velocidad donde el flujo de peatones o ciclistas es más notorio, permiten que, ante cualquier siniestro o error humano, este no termine en un deceso ya que, al transitar a menor velocidad, es mayor la capacidad de reacción que tendrán los conductores.
Autor: Oscar Urquidy. Licenciado en Diseño Urbano y del Paisaje por la Universidad Autónoma de Sinaloa. Miembro staff de Mapasin.