Adulto mayor fallece en siniestro vial por vehículo en sentido contrario en la Colonia Chapultepec | Mapasin

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Un nuevo siniestro vial en la colonia Chapultepec expone nuevamente los riesgos que enfrentan los usuarios de las calles mal diseñadas. El pasado sábado 25 de enero del presente año, un hombre de 66 años perdió la vida tras una colisión provocada por un vehículo que circulaba en sentido contrario. Este hecho, lejos de ser un accidente aislado, refleja fallas estructurales persistentes en el entorno urbano que permiten que errores comunes tengan consecuencias fatales. La falta de visibilidad, la invasión del espacio peatonal y la ausencia de medidas efectivas para disuadir conductas de riesgo configuran un escenario peligroso que exige atención inmediata.

 

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¿Qué ocurrió?

Sábado 25 de enero, 13:40 horas
Víctima: hombre mayor de 66 años de edad

En el cruce de la avenida Teniente Juan de la Barrera y la calle Teófilo Álvarez, ocurrió un siniestro vial que provocó la muerte de una persona adulta mayor. El incidente se originó cuando un vehículo que circulaba en sentido contrario por Teófilo Álvarez chocó contra otro automóvil que transitaba por la avenida, impactándolo del lado del conductor. Como resultado del golpe, la víctima sufrió heridas fatales.

 

¿Qué factores de riesgo se identifican para que este siniestro pudiera ocurrir?

Este siniestro pone en evidencia fallas estructurales del entorno vial que permitieron que un error común (circular en sentido contrario) tuviera consecuencias fatales. Aunque la zona fue intervenida recientemente, el cruce presenta una visibilidad deficiente, tanto por la falta de diseño adecuado como por la invasión de banquetas, lo que restringe el campo visual de los usuarios y reduce su capacidad para anticiparse al cruce de otros vehículos.

Además, los reductores de velocidad presentes en la intersección están mal diseñados, lo que limita su efectividad para disminuir la velocidad en una zona crítica. La práctica habitual de circular en sentido contrario por la calle Teófilo Álvarez, especialmente por parte de residentes de la zona, también refleja una falla del sistema de gestión del tránsito, al no haber un control efectivo ni elementos de disuasión adecuados para impedir esta conducta de riesgo.

 

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¿Cómo se pudo evitar este siniestro?, ¿Qué cambios se tienen que hacer para que no vuelva a suceder?

Este siniestro pudo haberse evitado mediante intervenciones que consideren las condiciones reales de uso del entorno y los errores previsibles de las personas. Una acción inmediata debería haber sido la reconfiguración y diseño funcional de los reductores de velocidad, de modo que realmente obliguen a los vehículos a reducir su marcha en zonas de alto riesgo.

Asimismo, mejorar la visibilidad en el cruce es clave: esto implica retirar obstáculos visuales, recuperar el espacio peatonal invadido y asegurar que la infraestructura permita a los conductores identificar claramente los vehículos y peatones que se acercan al cruce. De igual manera, es fundamental implementar un programa preventivo con tránsito municipal, orientado no solo a sancionar, sino a eliminar la práctica recurrente de circular en sentido contrario. Esto se puede lograr con medidas físicas, como bolardos, señalización reforzada, y campañas de sensibilización comunitaria.

Este siniestro no debe verse como un hecho aislado ni como una consecuencia inevitable del mal comportamiento de una persona. Las decisiones individuales están influenciadas por el diseño de la calle. Si una calle se utiliza frecuentemente en sentido contrario, el sistema está fallando en prevenir esa conducta. Las muertes viales, como esta, son evitables si se prioriza la seguridad en cada decisión de diseño y regulación.

Cada muerte en sitio es prevenible, y es responsabilidad de todos los actores del sistema generar condiciones que prioricen la vida.

 

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Autor: Ricardo Rodríguez. Ejecutivo de proyectos de Mapasin. Licenciado en Diseño Urbano y del Paisaje por la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), especialista en Pensamiento Estratégico Urbano por el Centro Iberoamericano de Desarrollo Estratégico Urbano (CIDEU).

 


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